La prostitución, la actos de participar en una actividad sexual relativamente indiscriminada, en general con cierto que no es un cónyuge o un amigo, a cambio de un plazo inmediato en capital u otros objetos de valor. Las prostitutas pueden ser mujeres o hombres o transgénero, y la prostitución puede implicar actividad heterosexual u homosexual, pero históricamente la veteranoÃa de las prostitutas han sido mujeres y la longevoÃa de los clientes hombres.
Las percepciones de la prostitución se basan en valores culturalmente determinados que difieren entre las sociedades. En algunas sociedades, las prostitutas han sido vistas como miembros de una profesión reconocida; en otros han sido rechazados, vilipendiados y castigados con apedreamiento, encarcelamiento y asesinato. Pocas sociedades han ejercido la misma severidad en torno a los clientes; de hecho, en muchas sociedades, los clientes sufren pocas o ninguna repercusión admitido. En algunas culturas, se ha requerido la prostitución de las jóvenes como un rito de la pubertad o como un medio para lograr una dote, y algunas religiones han requerido la prostitución de una cierta clase de sacerdotisas. Los antiguos griegos y romanos ordenaron que las prostitutas vistieran trajes distintivos y pagaran impuestos severos. La Ãndole hebrea no prohibÃa la prostitución, sino que limitaba la práctica a las mujeres extranjeras. Entre las ordenanzas establecidas por Moisés para regular la Vigor pública habÃa varias relacionadas con enfermedades de transmisión sexual.
En Europa durante la Perduración Media, los lÃderes de la iglesia intentaron rehabilitar a las prostitutas penitentes y financiar sus dotes. Sin embargo, la prostitución floreció: no solo fue tolerada sino igualmente protegida, autorizada y regulada por la calidad, y constituyó una fuente considerable de ingresos públicos. Se establecieron burdeles públicos en grandes ciudades de toda Europa. En Toulouse, en Francia, los beneficios se repartieron entre la ciudad y la universidad; en Inglaterra, los bordellos fueron originalmente autorizados por los obispos de Winchester y luego por el Parlamento.
Se impusieron controles más estrictos durante el siglo XVI, en parte adecuado a la nueva ético sexual que acompañó a la Reforma Protestante y la Contrarreforma. Igualmente significativo fue el dramático aumento de las enfermedades de transmisión sexual. Se hicieron intentos esporádicos para suprimir listado de escorts en madrid los burdeles e incluso para introducir inspecciones médicas, pero tales medidas fueron de poca utilidad.
A fines del siglo XIX, una variedad de cambios en las sociedades occidentales revivieron los esfuerzos para reprimir la prostitución. Con el surgimiento del feminismo, muchos llegaron a considerar el libertinaje masculino como una amenaza para el estado y la salud fÃsica de las mujeres. TodavÃa influyó un nuevo moralismo religioso en los paÃses protestantes. Las campañFigura contra la prostitución florecieron a partir de la lapso de 1860, a menudo en asociación con la templanza y los movimientos de sufragio FemÃneo. La cooperación internacional para poner fin al tráfico de mujeres con fines de prostitución comenzó en 1899. En 1921, la Ajonje de las Naciones estableció el Comité sobre la proxenetismo de mujeres y niños, y en 1949 la Asamblea Militar de las Naciones Unidas adoptó una convención para la represión de la prostitución. .